Victoria en el clásico de los Rangers en semifinales de la Copa escocesa ante un Celtic desconocido
Rangers 2-2 Celtic (5-4 en penaltis)
Alineaciones: Rangers: Foderingham; Tvernier, Wilson, Wallace, Kiernan (cambio por Zelalem 88`); Halliday, Ball, Holt; McKay (gol 96`), Miller (gol 16`, cambio por Clark 91`), Shiels (cambio por Law 66`).
Celtic: Gordon; Lustig, Bitton, Mulgrew, Tierney; Brown, Boyata (Cambio en el 25´ por Sviatchenko, que marcaría gol en el 50´), Roberts, Mackay-Steven (cambio por McGregor 71´), Johansen (cambio por Rogic en el 84´ que marcaría gol en el 106´); Griffiths
Hampden Park era el inmejorable campo de batalla de los dos equipos históricos del fútbol escocés. Con 52500 de capacidad, y categoría 4 por la UEFA, el estadio de la ciudad de Glasgow gozaba prácticamente de un aforo completo, con las aficiones divididas, ocupando cada una su respectiva mitad de la grada, para volver a ver un Old Firm cuatro años después.
El partido, como no podía ser de otro modo, comenzó y continuó con un constante duelo de dos aficiones que son enemigas acérrimas, y que cada vez que se encuentran en un partido, es tal la rivalidad que generan que el derby de Glasgow sea considerado uno de los más calientes del mundo.
Los Rangers, equipo de segunda división, claramente inferior en cuanto a calidad del equipo se refiere, jugaron todo el partido con una gran intensidad, que les permitiría llegar a la tanda de penaltis contra el líder de la Premiership escocesa. Comenzaron dominando el partido, y el primer gol llegaría en el 16, por parte del delantero referente de los ´Gers´ Kenny Miller, consiguiendo perforar la red tras un rechace de la defensa ´Celts´. El partido en su primera mitad seguiría controlado medianamente por los Rangers, pero el conjunto de Ronny Deila llevaría gran peligro tanto en contras como en ataque en estático, hasta el punto de que la mejor ocasión del partido la tendría Roberts, el canterano del Man City, ex del Fulham, que falló a puerta vacía el rebote producido tras un disparo al palo de la delantera Celts.
Ya en el segundo tiempo, Sviatchenko, que había comenzado como suplente, tuvo dos ocasiones seguidas e iguales alrededor del 50´: dos remates de cabeza de los cuales, el primero, tras un corner botado perfectamente por Roberts, acabó dentro de la portería. El Celtic buscaba el gol que sellara su pase a la gran final de la copa escocesa, pero nunca llegó, con lo que, con el fin de los 90 minutos, llegábamos a la Prórroga.
A pesar del desgaste físico de ambos equipos durante el partido, la prórroga fue realmente emocionante y trepidante, con dos equipos, que en distintas fases y condicionados por el momentáneo resultado del encuentro, se lanzaron a la ofensiva, a la victoria en las semifinales, del Old Firm, y a realzar el orgullo de su mitad de Glasgow. En el 96´ un derechazo del joven delantero ranger, McKay, puso por delante una vez más a los suyos, pero si de verdad creían que con esto habían sentenciado el derby, estaban realmente equivocados. Rogic, que había entrado prácticamente al final de los 90 minutos reglamentarios, fusiló a Foderingham recién comenzada la segunda parte de la prórroga. Se convirtió, durante aproximadamente 25 minutos, en el héroe de su equipo.
Los minutos restantes se harían eternos para el cuadro de Warburton, que consiguió aguantar y llegar de este modo a la tanda de penaltis. La suerte estaba echada. Ya en la muerte súbita, con 5-4 a favor de los Rangers, tocaba el turno del ´héroe´ Rogic, que mandaría su penalti por encima de la portería. Era el final. El Rangers se clasificaba para la final de la copa en la que se medirá al Hibernian de Edimburgo , eliminando a su eterno rival.
Terminada la crónica, tanto los que conocían este clásico escoces como los que no, se han podido dar cuenta que no es un partido más. Ganar o perder no implica 3 puntos más o 3 menos, una clasificación o una eliminación, no. Es el honor, el orgullo de esa mitad de Glasgow que ha salido victoriosa.
La ferocidad en los enfrentamientos entre ambas hinchadas no esta fundamentada únicamente en un pique futbolístico. Hay un alto grado de sectarismo en esta ciudad escocesa, fomentado por el fútbol. La hinchada del Celtic se vincula más al catolicismo y al sindicalismo irlandés, mientras la afición del Rangers es protestante y asociada al sindicalismo británico.
Aquí les dejo una tabla con datos de los distintos enfrentamientos entre ambos equipos en competiciones oficiales.
| Torneo | Jugados | Rangers | Empate | Celtic |
|---|---|---|---|---|
| Premier League Escocia | 304 | 119 | 85 | 100 |
| Copa Escocia | 48 | 18 | 9 | 23 |
| Copa de la Liga de Escocia | 48 | 24 | 2 | 22 |
| TOTAL | 400 | 159 | 96 | 145 |
Este es el segundo Old Firm (tras la victoria del Celtic por 2-0 el año pasado, en semifinales de Copa de la Liga) desde que el mítico Glasgow Rangers despareciera en 2012, y fuera refundado debido a las deudas por Charles Green bajo el nombre de ´The Rangers Football Club´, que comenzó su andadura en 4º división escocesa, debido a que los equipos de las distintas categorías superiores no aceptaran que esta nueva entidad se añadiera a su liga. 4 años después, quién nos los iba a decir, el mítico Rangers se encuentra en una situación inmejorable, en la final de la FA cup escocesa, contra otro histórico en horas bajas como es el Hibernian, que también se encuentra en 2º, y matemáticamente campeón de la Championship, que le da el acceso directo a la Premiership, el lugar del que nunca debió marcharse... lo que todos sabemos que significa... ¡Más Old Firms!
